MÍSTICO PECADO

A lo lejos una campana tañe su quejumbroso canto, pareciera como si llorara el llanto de un corazón en duelo…se me eriza la piel! Están enterrando a dos niños, víctimas de su padre, que también es víctima de su desesperada alma.

Como duele saber que esos niños quedaron a merced de la pasión, del abandono, del ‘’vos tuviste la culpa’’…dos vidas que en su inocencia, tenían sueños y se sentían a resguardo, por su progenitor, que se convirtió en verdugo, víctima del amor no amado…

Que pecado el amor cuando no es correspondido…lastima, hiere, golpea y mata. Lleva a todo ser, a cometer locuras donde la razón no es auxilio ni cura. Conjuros endemoniados, visiones de cruces y santos, son todas éstas disculpas, que le dan carátulas, al vínculo desvinculado…

No es juego el amor cuando en su proyección, trae hijos al mundo, y en el intento de salir victorioso, el uno contra el otro, cuando el amor no funciona, se crea la puja, que lleva a la lucha, de saber quien es el mejor…No hay mejor cuando no hay amor, y cuando este no existe, no hay vencedores ni vencidos, pues tanto, el uno como el otro, tendrán que asumir las culpas de los pecados, que su irresponsabilidad les dejó.

El pecado de no amar trae implícita la pena. En el pecado va la penitencia…

Sufrirán también estos dos seres, cada uno por su lado…el uno porque mató a dos pedazos de su propia carne, y el otro porque dejó, en suspenso, un sentimiento, que en nombre del amor no amado, prometió venganza sin esperanzas…

En ésta terrible historia de éstos niños, arrancados de la vida, sin tener escapatoria, no hay mística, ni había amor…

No le culpen a Dios, que ellos no sea hayan amado como manda el corazón…